El día martes 9 de este mismo mes de noviembre fui invitada a una cena realizada por el Rotary Club de Bernal Oeste, partido de Quilmes.
¿Qué es el Rotary Club? “Es una organización de personas quienes forman una alianza mundial con el fin de prestar servicio humanitario. Es la asociación de clubes de servicio de mayor antigüedad en el mundo. Los rotarios planean y llevan a cabo una gran variedad de programas humanitarios, educativos y de intercambio cultural que afectan la vida de muchas personas en sus propias comunidades y en la comunidad mundial”.
¿Cómo llegué a cenar con sus miembros? Ellos consideraron que yo era un ejemplo para mi barrio y me eligieron (suena un poco vanidosa pero eso fue lo que me dijeron ellos XD).
La cena era a las 21:00 hs en el salón donde cada martes por la noche los Rotarios se juntan para sus reuniones. Yo fui invitada junto con mi mamá y mi papá que me acompañaron. Una reunión rotaria tiene un protocolo, incluso para sentarse a la mesa. Mi lugar era a la cabeza y a mi lado estaba sentado Carlos, el ex presidente, a su lado el actual presidente y luego el secretario. En el resto de la mesa estaban los demás miembros y sus esposas.
Antes de que se sirva la comida todos los integrantes debíamos pararnos y presentarnos aclarando a qué nos dedicábamos. Lo que no recuerdo es si primero tuve que izar la pequeña bandera sobre la mesa o fue después. Bueno, el caso es que tuve que izarla. Luego que todos nos sentáramos, mientras nos servían la cena, el secretario comentaba las noticias y mensajes de la semana.
La verdad que tenían todo cronometrado, cada cosa tenía su tiempo en la reunión. En un momento de la cena, el presidente se levantó de su asiento e hizo tocar la campana frente a él con un martillito. Cuando acaparó la atención de todos dijo unas hermosas palabras explicando el por qué de la cena: que consideraban que representaba a mi barrio y que era un ejemplo a seguir por mi juventud, esfuerzo y dedicación. También se les dedicó unas palabras a mis padres porque si en ellos no sería quien soy.
La verdad que todo fue muy conmovedor porque estas personas conocen a mi padres, me conocen a mí, somos todos vecinos. Recibir su apoyo, su agasajo, su reconocimiento, todo eso es muy importante y más cuando te dicen todo el tiempo que “uno no es profeta en su tierra”. Quizá todavía no sea conocida a nivel nacional pero me basta con que mis vecinos estén orgullosos de lo que hago. También se leyó un discurso, escrito por Carlos, donde las palabras admiración y respeto estuvieron presentes. ¿Qué más podría pedir?
Pues había más, porque me obsequiaron una pluma con la insignia rotaria y un diploma que dice: "Por cuanto: La srta. Magalí Varela. En razón de la publicación de su primer libro "Tu lado Salvaje" se ha constituido para la comunidad, en una promesa en el campo de la cultura popular. Acorde nuestro sentimiento rotario, le otorgamos este testimonio como muestra de apoyo y singular reconocimiento"
No me queda más por contar, sólo agregar que fue una noche que siempre recordaré. Mis padres y yo nos fuimos conmovidos. ¡Muchas gracias a todos los miembros del Rotary Club de Bernal Oeste!
He aquí mi crónica.
Cariños,
Magui.
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