La kryptonita de los escritores

Según mi experiencia, y corroborado con otros colegas, la kryptonita de un escritor (o sea su punto débil si no son amantes de los cómics de Superman) pueden ser todos o algunos de los siguientes factores:

*Comodidad: creo que de todos los puntos débiles que puede tener un artista en general la comodidad es el peor de todos. Si estás cómodo te envuelve una pereza involuntaria porque a tu vida no le está pasando nada por lo que escribir. Escribir básicamente es tener inquietudes, si uno ya tiene todo lo que necesita y por ende se siente cómodo, no habría espacio para los malestares más básicos que te llevan a estar activo y en guardia. La comodidad, por supuesto, es relativa. Para algunos estar cómodo es poder vivir en un país seguro y sin crisis, para otros es tener un techo y comida a pesar del caos, y así. 

*Internet: ¿Hace falta que lo explique? Internet es la kryptonita de todos los que desean ser productivos en la era moderna (¿o ya estamos en la posmoderna?). Es una bendición y al mismo tiempo una maldición. 

*Dinero: Este punto depende mucho del escritor pero generalmente tener dinero te lleva al punto uno, la comodidad, y volvemos al círculo vicioso. Aunque algunos no se ven tentados por esto, por eso digo que depende del autor. Sin embargo, muchas veces somos más productivos cuando no lo tenemos y es porque en el fondo vamos detrás de él. Por lo menos para sustentarnos.  

*Amor: Este punto también es relativo. Muchos grandes autores han sido grandes pero con relaciones sentimentales desastrosas. Otros han podido equilibrar la escritura con el amor. Y es que no siempre tienen que ser adversarios pero sí es cierto que el amor es la kryptonita más agridulce de todas. ¿Nunca les pasó que cuando están enamorados no tienen ganas de hacer nada sin la otra persona? Bueno, eso es incompatible con la escritura. Se necesita mucho tiempo en soledad para escribir y, muchas veces, se necesita de la oscuridad para ahondar temas que no se pueden alcanzar cuando estamos abrigados por el calor del amor. 

Estos cuatro factores son subjetivos pero recurrentes. Yo sé cuál de estos es mi kryptonita y estoy aprendiendo a combatirla... 

Ci vediamo!