De nuevo con ustedes

Queridos amigos del blog... ¡He vuelto!

A lo largo de mi vida como "bloggera" he tenido mis altibajos con este blog y éste último fue bastante prolongado, pero como la gran mayoría de las cosas, tiene una explicación. Y la explicación es que me mudé, crucé el gran océano y ahora vivo en... ¡Italia!
Para algunos será una sorpresa y para otros (los que me siguen en Twitter y Facebook ejem... ejem...) no lo es en lo absoluto. Pues bueno, una mudanza así requiere de mucho tiempo y energía, y por ese motivo, sumado mis compromisos laborales y la procrastinación constante, me han impedido de mantener este espacio actualizado.

Sé que querrán hacerme muchas preguntas sobre los por qué y los cómo así que compartiré con ustedes un poquito de lo que me sucedió en estos meses.
Después de dos años de planificarlo decidí irme a vivir a la ciudad de Pisa, sí, donde está la torre inclinada. ¿Por qué? Respondiendo de forma amplia: porque me enamoré de Italia y, en especial, de Pisa cuando la conocí dos años atrás. Y una respuesta vista con una lupa: porque ya tenía amigos viviendo acá, porque es una ciudad universitaria llena de gente joven, ¡porque está en la Toscana y en esta región se gestaron grandes artistas! Mi sentido de la aventura me impulsó a armar dos simples valijas, decirle hasta luego a familiares y amigos (nunca un adiós por supuesto, no voy a desaparecer del mapa) y me vine con las ganas de seguir cumpliendo sueños.
¿Saben qué? En cuanto puse un pie en suelo italiano, me di cuenta que había vuelto al lugar del que no me tendría que haber ido nunca...
Así que aquí estoy, disfrutando de la comida italiana, aprendiendo el idioma y, claro está, escribiendo, escribiendo, escribiendo...

Prometo contar más sobre mi aventura italiana pero "piano piano".

Ci vediamo!